Queridos amigos y enemigos,
lectores y leedores, paseantes de miradas con intenciones de palabras concretas
y altivas, en fin diversos ojeadores con alma de críticos. ¡Sí, tengo la insalvable
sensación de permanecer por los aires sin ningún motivo aparente! Voy de un lado
a otro y no llego a lograr un impulso que me ubique en el espacio en que
habito. Necesito una motivación que me haga sentir que mis pies pisan tierra
firme y no son simples portadores de alas transportadoras.
¿Qué puedo hacer ante esta disyuntiva?
¡No lo sé, pero creo que no debo continuar por rumbos inciertos dejando una
estela de incertidumbres a cada paso que doy……………..!
Continuará……………….