Así es cómo está literalmente el país, en llamas. ¿Habrá llegado la hora del armagedón? ¡Posiblemente! Es la hora de terminar con un ciclo y renacer de las propias cenizas. ¡Naturalmente, sin los políticos de ahora que alimentan el fuego!
Creo que todo es consecuencia
de factores reales que se han ido acumulando durante estos años de seudo-democracia
imperante. ¡Una terrible plaga de incompetencia, falta de liderazgo, objetividad,
malversaciones, robos con toda la extensión de la palabra, y despilfarros a manos de los dueños de cortijos (alcaldes, diputados, presidentes de
comunidades, y demás fantoches de turno), han hecho de este país un cultivo de
las llamas!
Ahora muchas regiones están
sufriendo las consecuencias de las llamas. De las llamas que destruyen todo lo
que se ponga en su camino. ¡Es una verdadera calamidad, y siempre son los
mismos afectados! ¿Quiénes son los culpables del fuego? ¡El gobierno señala con
insistencia a los pirómanos y a las negligencias de los ciudadanos que no son
conscientes de sus actos! ¡Es la política! ¡El arte de desviar la atención con
el fin de salvar el culo instituido en el trono del poder!
Este fuego es real, pero a la
vez es un símbolo. ¡Cuando en casa las cosas marchan bien todo está bajo
control, pero si llega el desmadre todo se desvirtúa! Es la fábula de la hormiga y la cigarra. ¡Para comer en invierno hay
que trabajar desde el verano!